Las Hermanas: Nuestra Señora de la Consolación de Sumampa y La Virgen de Luján recorren el país.

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La organización laical, ciudadana y eclesial de "La Carreta de Dios" recorrió distintos puntos de la provincia de Misiones, misionando con la figura de María de Luján y la Virgen de Sumampa, labradas de la misma forma en que llegaron al territorio argentino. 
“Teníamos proyectado viajar a la tierra colorada hace ya bastante tiempo, pero esa ida se nos fue postergando por diversas circunstancias. Hasta ahora, que gracias a Dios y a sus tiempos perfectos nos quiso en Misiones especialmente en esos días. Y, en el viaje, compartimos experiencias amenas y sobre todo muy profundas”, destacó Carlos Figueroa, laico consagrado, quien viaja junto a su esposa, Marcela Frumento y el resto de la organización a distintos puntos del país llevando la imagen de María. 
Figueroa detalló que vivió dos experiencias muy enriquecedoras. Primero “poder llevar a la Virgen a las Cataratas del Iguazú, cumpliendo con los versos del poema que alude a su presencia en la tierra colorada”, dijo Figueroa. Y, en segundo lugar: “Poder llegar a la comunidad de Colonia Luján en carreta, tal cual lo hizo la Santa Madre al llegar a nuestro territorio nacional”, agregó al tiempo que agradeció la colaboración de Elisa Ely de Svierzs, anfitriona y referente de la capilla de Nuestra Señora de Luján de Colonia Luján, Misiones. 
La carreta de Dios viaja desde 2015 con la icónica premisa “de La Quiaca (Jujuy) y Salvador Mazza (Salta) a la Antártida, y desde Los Andes a Misiones y el Atlántico”, con la intención de llevar la palabra de Dios a los lugares que más necesiten de su presencia. 
Además de evangelizar, brindan charlas, seminarios y enseñan a través de relatos la historia de Nuestra Señora de Luján, patrona de la Argentina y Nuestra Señora de la Consolación de Sumampa, patrona del Pueblo Santiagueño.
La organización recorrió en Misiones las comunidades de Garuhapé y San Pedro, enseñándoles la figura de María de Luján así como llegó al Río de la Plata en 1630: una estatua de arcilla cocida, pequeña y sencilla, de unos 38 centímetros de altura. 
Siguiendo con su misión evangelizadora, luego de su paso por la tierra colorada, la organización adherirá también a la peregrinación que realizará a la Antártida la imagen de la Virgen de Luján que estuvo presente en la Guerra de Malvinas, restituida por el Reino Unido luego de 37 años a los Veteranos de Malvinas en presencia del papa Francisco. 
La imagen viajará a bordo del rompehielos ARA Almirante Irízar y las figuras de Nuestra Señora de Luján de 1630 y la Virgen de Sumampa acompañarán el viaje.

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